Auditoría Interna

Por: Jesús Aisa Díez - Colaborador de Auditool 

A diferencia de la gran mayoría de las profesiones, la de auditoría interna se ha dotado de normas para guiar el adecuado funcionamiento de la actividad, y ello es debido a varias circunstancias, entre otras el que se ejerce en entornos diferentes y en empresas de distinto tamaño, objetivos y estructura, de las que se deriva la conveniencia de disponer de un marco normativo que homogenice, hasta donde sea posible, la actividad auditora, a fin de poner en común a todos estos profesionales tan diversos, en la forma de entender la actividad, así como los principios que la regulan.

Si acudimos al Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, nos encontraremos que por Norma se debe entender como la regla que se debe seguir o a la que se deben ajustar las conductas, tareas, actividades.

En el caso concreto de las Normas del Instituto de Auditores Internos, estas focalizan sus objetivos en los siguientes apartados:

• Definir los principios básicos que representen el ejercicio de la Auditoría Interna tal como debería ser.
• Promover un marco para ejercer y fomentar las actividades de Auditoría Interna de valor añadido.
• Establecer las bases para evaluar el desempaño de la función.
• Fomentar mejoras en los procesos y operaciones de la organización.

Todo ello con el condicionante de que su implementación dependerá del entorno en el que la actividad auditora interna desempeñe sus responsabilidades, ya que en ningún caso su contenido debe ser aplicado de forma que entre en conflicto con la legislación que resulte de aplicación, dado que esta siempre dispondrá de mayor autoridad y capacidad de regulación, como no podría ser de otra manera.

Adicionalmente podemos señalar que las Normas que describen la forma de desarrollar la función auditora interna pretenden básicamente conseguir la eficiencia deseada de la actividad, permitiendo detectar la falta de alineamientos entre lo que hacemos y lo que deberíamos hacer, lo que posibilitará adoptar las medidas correctoras adecuadas para corregir los incumplimientos observados.

En resumen, las normas lo que persiguen es ayudarnos a encontrar la forma correcta de desarrollar la actividad, a través de dos objetivos:

• Proporcionando una guía que facilite la interpretación y aplicación de conceptos, metodologías y técnicas fundamentales para la profesión, y
• Siendo el auditor interno, cada vez más, uno de los profesionales mejor cualificados dentro de la organización, se busca homogeneizar convenientemente la profesión, en base a las mejores prácticas conocidas.

Como bien sabemos el Instituto de Auditores Internos está ubicado en Altamonte Springs, Florida (USA), por lo que sus documentos están redactados inicialmente en inglés, debiendo los Institutos locales proceder a su traducción. Lo cual en algunos casos pueden generar algunas inconsistencias.

Aspecto que hemos observado en el texto del actual Marco, en el que el término inglés mandatory, se ha traducido por “mandatorio”, expresión que no está reconocida por la Real Academia de la Lengua Española, debiendo haberse traducido por “obligatorio”, que era la empleada en la anterior edición del Marco.

Si bien debemos señalar que esta “obligación” es solo aplicable a aquellas Unidades de Auditoría Interna que se hubiesen decantado por el empleo de las directrices del Instituto de Auditores Internos de forma voluntaria, pues no es una obligación legal.

Hasta el inicio del presente ejercicio, el Marco Internacional para la Práctica Profesional de la Auditoría Interna contenía 6 componentes, tres de ellos “obligatorios” y otros tres “muy recomendados”.

Los obligatorios eran: La definición de auditoría interna, las Normas internacionales y el Código de Ética.

Mientras que los muy recomendados eran: las Guías Prácticas, los Consejos para la Práctica y las Declaraciones de posición.

En enero del presente ejercicio el IIA emitió una nueva versión del Marco Internacional para la Práctica Profesional de la Auditoría Interna, la cual consta de dos grandes bloques: Las Guías obligatorias y las Guías Recomendadas.

En el Grupo de las Guías obligatorias, ahora hay cuatro apartados: Lo principios fundamentales, la definición de auditoría interna, el Código de ética y las Normas.

Mientras que el apartado de las Guías Recomendadas, nos encontramos con dos tipos de documentos: las Guías de implementación y las Guías suplementarias.

  Jesús Aisa Díez

Ingeniero Técnico Industrial Universidad Politécnica de Madrid, Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, Ex-Subdirector General Corporativo de Auditoría Interna de Telefónica SA., ponente de diversos cursos y workshops sobre materias relacionadas con el control interno. Evaluador certificado de Quality Assurance y director de múltiples evaluaciones de calidad de Unidades de Auditoría Interna realizadas en el ámbito iberoamericano, tanto en España, Portugal, como en diversos países latinoamericanos (Chile, Perú y Colombia). Ponente y conferencista en diversos eventos internacionales, tanto en España, como Iberoamérica. Colaborador de www.auditool.org.

Madrid, España