Por: CP Iván Rodríguez. Colaborador de Auditool.

El comportamiento ético del auditor en el trabajo remoto es tan importante como en el trabajo presencial. Al trabajar de forma remota, el auditor debe seguir los mismos principios éticos que se aplican en cualquier otro entorno de trabajo. Esto es aplicable a cualquier profesional que labore de forma remota.

En la medida en la que trabajadores y empresas continúen adoptando acuerdos flexibles, que implican una combinación de trabajo presencial y remoto, el enfoque, además de centrarse en los aspectos técnicos de la actividad que se ejecute, debe considerar elementos intangibles como la ética.

Algunas consideraciones éticas clave que los auditores que trabajan de forma remota deben tener en cuenta son las siguientes:

  • Independencia: el auditor debe mantener su independencia y objetividad durante todo el proceso de auditoría. Debe evitar cualquier conflicto de intereses o influencia indebida que pueda afectar su juicio profesional.
  • Confidencialidad: el auditor debe proteger la información confidencial del cliente y asegurarse de que se maneje de manera segura y adecuada. Debe utilizar herramientas seguras para la transferencia de datos y evitar compartir información confidencial con personas no autorizadas.
  • Integridad: el auditor debe actuar con integridad y cumplir con sus responsabilidades profesionales de manera honesta y ética. Debe evitar cualquier comportamiento deshonesto o engañoso y ser transparente en todas las comunicaciones con el cliente.
  • Competencia profesional: el auditor debe tener las habilidades y el conocimiento necesarios para realizar una auditoría de alta calidad. Debe actualizar su conocimiento técnico y cumplir con los requisitos de educación continua para mantener su competencia profesional.
  • Comunicación: el auditor debe comunicarse de manera efectiva y clara con el cliente y otros miembros del equipo de auditoría. Debe asegurarse de que todas las comunicaciones sean precisas y estén respaldadas por evidencia adecuada.

Para las firmas representa un desafío garantizar que sus empleados estén preparados para el éxito en la toma de decisiones éticas, al tiempo que los empoderan en un ambiente remoto. Un factor clave en este propósito está en construir un equipo de líderes éticos, o individuos que lideren con inteligencia emocional, escucha activa y responsabilidad personal.

Si bien los líderes normalmente se basan en diferentes tácticas para alentar a sus equipos a hacer lo correcto, las estrategias a menudo se reducen a algunos temas comunes. Construir líderes más éticos incluye mostrar a los equipos cómo se ve el buen comportamiento, ser transparentes sobre los errores, dar a los miembros del equipo oportunidades para ser modelos a seguir y proporcionar a los empleados tiempo y espacio para tomar decisiones informadas.

A continuación, 4 medidas que pueden adoptar los líderes de los equipos de auditoría:

  1. Aplicación de principios de liderazgo ético

En el pasado, los líderes podían influir en los equipos directamente dentro de la oficina. Sin embargo, en un entorno remoto o híbrido, hay cambios. Por ello, antes de que los empleados híbridos puedan hacer lo correcto, los empleadores deben procurar mostrarles cómo se ve el buen comportamiento desde sus hogares. Y darles oportunidades para ser modelos a seguir desde sus hogares. Todo mientras reconocen que tienen sus vidas personales con las que lidiar mientras trabajan en casa.

Los gerentes deben adaptar sus estilos de liderazgo creando nuevas prácticas, fomentando un sentido de propósito para cada empleado e inculcando un sentido de pertenencia. Además, las firmas pueden requerir que los líderes tengan de dos a tres años de experiencia en la gestión exitosa de equipos de trabajo híbridos dados los desafíos únicos que esto presenta. Finalmente, las organizaciones deben dar a los líderes la oportunidad de experimentar en la creación de mejores prácticas y explorar nuevas formas de pensar.

  1. Crear equidad

Si bien el trabajo híbrido no es nuevo, cada vez se presta más atención a las desigualdades que puede causar. Cuando se aplica el trabajo remoto sin el debido cuidado y los líderes no han sido entrenados adecuadamente para navegar en este nuevo mundo de trabajo, las firmas corren el riesgo de que se formen culturas tóxicas y divisiones entre los trabajadores. Por ello, las firmas deben ser críticamente conscientes de la inclusión y la equidad híbrida para evitar riesgos de retención y una disminución en el compromiso y el bienestar de los empleados.

Los gerentes y líderes de los equipos de auditoría deben entender cómo fomentar la seguridad psicológica donde todos los empleados se sientan igualmente apoyados. Los líderes dentro de las organizaciones deben entender que requieren diferentes habilidades y hacer que la firma proporcione los recursos necesarios. La mentalidad de equidad debe ser consistente en todos los niveles, y cada empleado debe tener acceso a oportunidades de capacitación y a recursos que le permitan laborar en condiciones similares a los demás. Los líderes también deben adoptar las siguientes tácticas:

  • Crear espacios de contacto personal con empleados remotos
  • Proporcionar una línea de comunicación abierta y segura
  • Fomentar la promoción y la capacitación para los trabajadores remotos
  1. Abordar la inequidad

Los empleados aportan fortalezas y talentos únicos al lugar de trabajo, pero pueden perder visibilidad en entornos híbridos. Para empoderarlos e impulsar el éxito, los líderes deben promover el respeto, la diversidad y la equidad de los empleados.

Algunas medidas prácticas para abordar la inequidad son:

  • Asegurarse de que todos los miembros del equipo tengan el mismo acceso a la información y puedan comunicarse eficazmente entre sí. Esto puede incluir videoconferencia, mensajería instantánea, correo electrónico u otras herramientas que faciliten la comunicación en tiempo real.
  • Establecer expectativas claras sobre cómo se espera que los miembros del equipo participen en las reuniones, contribuyan en los proyectos y se comuniquen entre sí. Hay que asegurarse de que estas expectativas sean equitativas y tengan en cuenta las diferentes necesidades y limitaciones de los miembros del equipo remotos y en persona.
  • Proporcionar capacitación y recursos para ayudar a los miembros del equipo a desarrollar las habilidades y el conocimiento que necesitan para trabajar de manera efectiva en un entorno de equipo híbrido. Esto podría incluir capacitación sobre comunicación virtual, herramientas de gestión de proyectos u otros temas relevantes.
  • Crear una cultura que valore la diversidad y la inclusión y que aliente a todos los miembros del equipo a contribuir con sus perspectivas e ideas únicas. Esto podría implicar la creación de grupos de afinidad u otras iniciativas para ayudar a construir conexiones y fomentar un sentido de comunidad entre los miembros del equipo.
  1. Fomentar el comportamiento ético

Esto puede requerir un enfoque diferente en comparación con el trabajo presencial. A continuación, se presentan algunas formas en las que esto puede lograrse:

  • Establecer políticas claras: las políticas deben abarcar temas como la independencia, la confidencialidad y la integridad, y deben ser comunicadas claramente a todos los empleados.
  • Capacitación: ofrecer capacitación periódica sobre ética en el trabajo remoto para todos los empleados puede ayudar a asegurar que todos estén al tanto de las políticas y los requisitos éticos. Esto puede incluir cursos en línea, seminarios web o sesiones de capacitación en vivo.
  • Supervisión y monitoreo: los gerentes deben supervisar de cerca a sus equipos para asegurarse de que se cumplan las políticas éticas y los procedimientos.
  • Comunicación abierta y honesta: fomentar la comunicación abierta y honesta entre los miembros del equipo y la gerencia puede ayudar a prevenir problemas éticos. Los empleados deben sentirse cómodos al informar sobre posibles infracciones éticas sin temor a represalias.
  • Tecnología y seguridad: hay que asegurarse de que los empleados tengan acceso a tecnología segura y que se toman medidas para proteger la información confidencial. Esto puede incluir el uso de herramientas de colaboración en línea seguras y la implementación de políticas de seguridad de datos.

Al seguir estas medidas, se puede ayudar a garantizar que todos los miembros del equipo, independientemente de su ubicación o estilo de trabajo, tengan una experiencia equitativa e inclusiva trabajando en un entorno de equipo híbrido. Incluso si la presencia física en la oficina está disminuyendo, tomar estas medidas asegurará que los auditores puedan mostrar integridad, hacer lo correcto y prosperar como líderes éticos en un lugar de trabajo híbrido.


CP Iván Rodríguez - CIE AF

Auditor y consultor, diplomado en Alta Gerencia de Seguros y Derecho de Seguros. Especialista en Dirección Financiera y Desarrollo Organizacional, diplomado en Gerencia de la Calidad. Contador público (CP) de la Pontificia Universidad Javeriana con 20 años de experiencia en diversas empresas. Tiene amplia experiencia en la elaboración y ejecución de auditorías y revisorías fiscales. Dirección y ejecución de asesorías, consultorías y capacitaciones. Colaborador de Auditool.

Bogotá D.C., Colombia.

 

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