Por: Equipo Auditool
En el mundo de la auditoría, el feedback constructivo juega un papel crucial tanto para el crecimiento personal como profesional. Dar y recibir retroalimentación efectiva no solo mejora la calidad del trabajo, sino que también fomenta un ambiente de aprendizaje continuo y colaboración. Aquí te presentamos algunos consejos clave para manejar el feedback de manera efectiva en el ámbito de la auditoría.
Dar feedback constructivo
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Sé específico y objetivo: al dar feedback, enfócate en hechos específicos y evita generalizaciones. Por ejemplo, en lugar de decir: "Tu trabajo no está a la altura", señala un informe específico y comenta sobre aspectos concretos que podrían mejorarse.
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Enfoque positivo: empieza destacando aspectos positivos antes de mencionar áreas de mejora. Esto ayuda a crear un ambiente receptivo y reduce la defensividad.
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Orientado a asoluciones: ofrece sugerencias claras y prácticas sobre cómo mejorar. Esto convierte el feedback en una herramienta para el crecimiento en lugar de una crítica.
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Sé oportuno: proporciona feedback poco después de haber observado el comportamiento o el trabajo en cuestión. Esto asegura que los detalles estén frescos y sean relevantes.
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Fomenta el diálogo: invita a la persona a expresar su punto de vista. Esto no solo muestra respeto, sino que también puede proporcionar una comprensión más profunda de las circunstancias.
Recibir feedback constructivo
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Mantén una mentalidad abierta: cuando recibas feedback, hazlo con una actitud de aprendizaje. Evita estar a la defensividad y considéralo como una oportunidad para crecer.
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Escucha activamente: presta atención completa a quien te brinda feedback. Evita interrumpir y haz preguntas si algo no está claro.
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Reflexiona sobre el feedback: tómate un tiempo para procesar la información. Piensa en cómo puedes aplicar lo aprendido para mejorar tu desempeño.
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Pide ejemplos específicos: si el feedback es vago, pide ejemplos concretos para entender mejor las áreas de mejora.
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Desarrolla un plan de acción: basándote en el feedback recibido, elabora un plan de acción para abordar las áreas de mejora.
Feedback y cultura de auditoría
En una cultura de auditoría saludable, el feedback no es un evento aislado, sino que hace parte de un proceso continuo de desarrollo y mejora. Fomentar un entorno en el que el feedback constructivo sea la norma puede llevar a una mayor eficiencia, mejor calidad en el trabajo y un ambiente de trabajo más armonioso y productivo.
Recuerda que en la auditoría, donde la precisión y la mejora continua son fundamentales, el feedback constructivo no es solo una herramienta para el crecimiento personal y profesional, sino también un pilar para el éxito del equipo y de la organización.