Por: CP Iván Rodriguez. Colaborador de Auditool
La insolvencia se ha convertido en una amenaza importante para un gran número de empresas en diferentes países. Los gobiernos han adoptado una serie de medidas tendientes a mantener el número de insolvencias al mínimo, tales como otorgar préstamos, servir de garante, flexibilizar normas laborales, aplazar pagos de servicios y prestar ayudas a diferentes sectores económicos, con requisitos algo más laxos que los tradicionales.
Si bien estas medidas gubernamentales pueden ayudar a las empresas a tener un mejor manejo de sus recursos, es fundamental que se tomen medidas inmediatas de reducción de costos. Es en este entorno en que los auditores deben prestar su concurso para que las empresas superen con éxito las actuales circunstancias.
Es necesario que la alta dirección explore las diferentes alternativas, de acuerdo con su situación particular y la auditoría debe verificar si se está accediendo a ellas en las mejores condiciones.
Una primera opción es estudiar y hacer uso de los esquemas de apoyo que ofrecen los gobiernos, en los casos en que sea viable. La auditoría debe evaluar, desde la órbita de su competencia, la gestión de la empresa cliente al respecto.
Otra medida necesaria, es la negociación con los acreedores. Toda vez que los acreedores posiblemente se encuentran en una situación difícil, sería deseable buscar un acuerdo que resultara beneficioso para las dos partes. Desde obtener plazos para los pagos de deudas y compromisos, hasta evaluar los pagos en especie son posibilidades que deben explorarse.
Las reducciones de costos y gastos deben ser drásticas. Hay que efectuar una seria revisión de los conceptos que implican pagos y desembolsos, para buscar su reducción al mínimo necesario. Aunque no existiese la actual coyuntura por la pandemia, no efectuar una revisión de los resultados de las empresas, podría hacer que costos y gastos excesivos llegaran a causar la insolvencia empresarial.
Examinar otras fuentes de ingresos es otra medida. Los negocios deben reinventarse, buscar nuevos productos, servicios y canales. Las necesidades del mercado han cambiado y es necesario satisfacer la nueva demanda.
El consenso general es que las medidas implementadas por los gobiernos podrían ayudar a mantener a flote a la mayoría de las empresas en el futuro previsible. Sin embargo, también es claro que la actividad económica tomará un cierto tiempo y que el regreso a la normalidad puede estar a meses de distancia.
Aún no está claro que acciones tomarán los gobiernos para ayudar a las empresas en los siguientes meses. Es por ello necesario que la alta dirección de las empresas busque como mitigar los efectos de esta crisis en el corto y mediano plazo y que los auditores estén alerta a las decisiones adoptadas al interior de las empresas, para su evaluación.
CP Iván Rodríguez
Auditor y Consultor, Diplomado en Alta Gerencia de Seguros y Derecho de Seguros. Especialista en Dirección Financiera y Desarrollo Organizacional, Diplomado en Gerencia de la Calidad, Contador Público de la Pontificia Universidad Javeriana, con 20 años de experiencia en diversas empresas. Amplia experiencia en la elaboración y ejecución de auditorías y revisorías fiscales. Dirección y ejecución de asesorías, consultorías y capacitaciones. Colaborador de Auditool
Bogotá DC, Colombia
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