Por: C.P. Iván Rodríguez. Colaborador de Auditool
El ritmo de cambio dentro de la profesión de contabilidad y auditoría está creciendo exponencialmente, con una mayor demanda de la profesión para mantenerse al día y satisfacer las expectativas cambiantes tanto del personal como de los clientes. La tecnología, en particular, claramente está impulsando cambios en la auditoría, desde la aplicación de IA hasta los riesgos de alcance y la verificación de transacciones.
En los últimos años ha habido un mayor énfasis en los datos. Tener una auditoría basada en datos es primordial para impulsar la eficiencia, la calidad y el servicio al cliente. La tecnología se utilizará tanto para el análisis de cifras como para eliminar tareas manuales que requieren mucho tiempo. ¿Cómo? Se analizará toda la población de datos para identificar anomalías y áreas de riesgo para facilitar un plan de auditoría más sólido, permitiendo que el auditor se concentre en las áreas más riesgosas y adapte la auditoría para cada cliente. Los datos se utilizarán para realizar procedimientos automáticamente. Los datos también se visualizarán, como una herramienta para ayudar tanto al equipo auditor como al cliente. En todo caso no hay que olvidar que la tecnología debe mejorar el juicio profesional, pero no reemplazarlo.
El rol del auditor
El auditor debe fortalecer su posición como asesor de confianza. Los clientes esperan que el auditor les brinde honestidad, integridad, confianza y respeto. Recurrirán a un auditor para comprender cómo puede mejorar su negocio y tomar mejores decisiones. Será aún más crítico para un auditor tener acceso a datos y usar tecnología para ejecutar su trabajo de una mejor manera. Los temas clave son: datos, calidad y servicio al cliente.
Datos. Cuanto más cómodo esté el auditor para obtener y trabajar con los datos, más capacitado estará ser eficiente y mejorar la calidad. Esto es fundamental para seguir siendo rentable en su trabajo de auditoría e identificar nuevas oportunidades para sus clientes al proporcionar servicios de asesoramiento adicionales. La tecnología está disponible hoy para ayudar a los auditores a trabajar con los datos. Desde las suites de oficina (como Office) hasta programas especializados que le permiten a los auditores realizar fácilmente cientos de pruebas y visualizaciones.
Calidad. En tanto las empresas se proyectan al futuro, el auditor debe ejecutar sus labores cada vez con mayor calidad y debe fortalecer sus habilidades y herramientas para mantenerse. Las legislaciones locales, los organismos de control y las revisiones por pares, hacen necesario que el auditor sea cada vez más exigente. Lo que funcionó el año pasado no necesariamente funcionará hoy, sin importar el tamaño de la empresa.
Servicio al cliente. Otra habilidad crítica es la capacidad de construir relaciones y fomentar esas relaciones. Hay varias cosas que el auditor puede hacer aquí:
- Listas de documentos PBC (Prepared by Client): los auditores pueden ayudar a sus clientes a estar listos para su auditoría y cambiar su perspectiva de que la auditoría será de valor. Hay soluciones informáticas para administrar los documentos PBC en la nube, para ayudar a la empresa y al cliente a realizar un mejor seguimiento de lo que se requiere y cuándo.
- Captura de datos: En el mercado hay herramientas para capturar datos directamente desde el cliente. Estas herramientas tienen múltiples beneficios tales como brindar a los auditores una comprensión más sólida del cliente desde el principio y les permite obtener los datos necesarios para que los análisis aumenten la calidad y la eficiencia. Además, reduce la carga sobre el cliente, eliminando la necesidad de efectuar diversas solicitudes de información.
- Visualización: Comúnmente, los datos en sí mismos son difíciles de entender, pero cuando se presentan visualmente, es mucho más fácil su entendimiento. Los datos visualizados pueden usarse durante la auditoría para fortalecer las comunicaciones con el cliente, así como aumentar el informe final de auditoría.
Las preocupaciones más frecuentes:
Las principales preocupaciones, tanto firmas auditoras como de los auditores, son las siguientes:
- Mantenerse relevante;
- Mantenerse competitivo; y,
- Tener las herramientas adecuadas para hacer su trabajo.
Las firmas están en una constante búsqueda de la mejor manera en que pueden servir a sus clientes; tratan de evitar el trabajo manual y, en cambio, trabajar usando su criterio profesional para hacer una diferencia real para sus clientes. Por ejemplo, ¿cómo pueden ayudar a sus clientes a identificar riesgos? ¿O cómo encontrar mejoras en sus márgenes de beneficio en una determinada línea de negocio?
Con la actual competencia en el sector de los servicios, hay una carrera hacia el precio más barato. Esto ha llevado a la mercantilización del proceso de auditoría. Por tanto, hay que encontrar nuevas formas de agregar valor para los clientes. Es necesario crear una auditoría más eficiente a través de la tecnología, para poder hacer más con menos, resultando en un mejor precio y agregando más valor.
Las tecnologías emergentes, incluidos el análisis predictivo y la inteligencia artificial, probablemente continuarán mejorando la capacidad de los auditores para aprovechar los datos en beneficio de los clientes, agregando valor a través de conocimientos críticos y consultas. Seguramente habrá una disminución en el muestreo y un aumento en las pruebas a un nivel del 100 por ciento.
En el caso de las firmas pequeñas, con presupuestos recursos limitados, que buscan seguir siendo competitivas frente a las empresas más grandes, es conveniente adoptar los siguientes pasos:
- Ser más eficientes para mejorar los márgenes y aumentar el volumen.
- Disponer de más tiempo para concentrarse en oportunidades adicionales, que son valor agregado para los clientes.
Una de las claves para lograr esto, es buscar e implementar tecnología que ayudará a eliminar el trabajo manual, de manera que haya más posibilidades de enfocarse en recomendaciones estructurales y mejorar el juicio profesional. Hay que encontrar y utilizar tecnología que facilite el análisis y administración de información, como parte de una auditoría, así como aquella que permita crear nuevas ofertas de servicios.
Del mismo modo, los auditores deben comprometerse con las tecnologías que están impactando la auditoría, lo cual requiere una permanente capacitación y actuar en equipos interdisciplinarios para ampliar la visión frente al trabajo de auditoría.
Auditor y Consultor, Diplomado en Alta Gerencia de Seguros y Derecho de Seguros. Especialista en Dirección Financiera y Desarrollo Organizacional, Diplomado en Gerencia de la Calidad, Contador Público de la Pontificia Universidad Javeriana, con 20 años de experiencia en diversas empresas. Amplia experiencia en la elaboración y ejecución de auditorías y revisorías fiscales. Dirección y ejecución de asesorías, consultorías y capacitaciones. Colaborador de Auditool
Bogotá D.C, Colombia